Criaturas crepusculares
El manto es rojizo en primavera y verano, y de gris a marrón en invierno. La punta de la cola es blanca, lo que le sirve para batirla como señal de alarma. Presenta dimorfismo sexual. En Norteamérica los machos pesan entre 60 y 160 kg, y las hembras entre 40 y 105 kg. Los ejemplares tropicales son de menor tamaño, pesan menos y generalmente no sobrepasan los 60 kg.
Hábitat: bosques templados y tropicales, chaparrales, pastizales templados, desiertos, bosque tropical caducifolio y matorrales.
Distribución: Vive en diferentes ecosistemas de América, desde Canadá pasando por los bosques secos de las laderas montañosas de México, las selvas húmedas tropicales de América Central y del Sur, hasta los bosques secos ecuatoriales del Perú.
Reproducción: La hembra está lista para aparearse cuando tiene cerca de dos años de edad, mientras que los machos pueden aparearse cuando tienen aprox. cuatro años. El cervatillo demora en nacer 7. La mayoría de las veces una hembra pare un solo cervatillo.
Hábitos: De hábitos crepusculares, los ciervos de cola blanca pueden encontrarse en grupos desde dos hasta quince individuos. Las unidades sociales básicas son la hembra-cría, los grupos de machos juveniles y los machos solitarios en la época reproductiva.
Alimentación: Es rumiante y herbívoro, consume hojas, brotes, frutos y semillas, así como setas. Durante algunas épocas del año pueden incluir alimentos como las bayas de árboles pequeños y arbustos, bellotas y algunos tipos de frutas.
Estado de conservación según la IUCN: Preocupación menor.
Nombre científico: Odocoileus virginianus